Ronaldo, con un doblete, y el francés Varane decretaron el 3-1 sobre el Barcelona para llegar a la final de la Copa del Rey. Jordi Alba marcó el descuento. Oxígeno para José Mourinho. Cristiano Ronaldo comenzó a desequilibrar desde tempranon en el templo culé. El reloj marcaba 13 minutos cuando el portugués se introdujo a velocidad dentro del área y fue claramente derribado por Gerard Piqué. El árbitro Undiano Mallenco sancionó penal y el propio CR7 no perdonó frente a José Manuel Pinto. El Barcelona se mostraba nervioso frente a la desventaja y con el peso de la derrota por Champions League contra el Milan del pasado miércoles por 2-0, y el Real Madrid, bien plantado en defensa, asustaba en cada contragolpe.Lionel Messi contó con la situación más concreta de la parte inicial con un tiro libre desde las puertas del área que levantó a los 90.000 espectadores de los asientos.
En el complemento, el Barça fue al ataque desde el principio y chocó contra las paradas de Diego López y una defensa segura que cumplia a la perfección el planteo de José Mourinho.Hasta que en el minuto 57, Khedira rechazó en la zona defensiva, Ángel Di María se escapó en velocidad a Carles Puyol. sacó el remate, y tras la atajada de Pinto, Ronaldo capturó el rebote para definir al gol y convertirse en amo y señor del clásico. A los 68, Raphael Varane cabeceó un corner envíado al corazón del área para decretar la clasificación blanca. Sólo quedaba tiempo para que Jordi Alba anote el 1-3 del Barcelona. Alegría para el Madrid en medio de las turbulencias. El Barça pagó caro sus errores de definición en el duelo de ida en el Santiago Bernabéu -el resultado fue un 1-1- y sufrió en casa la ofensiva merengue. Sevilla y Atlético Madrid disputan el miércoles la otra semifinal de Copa del Rey. El ganador buscará el título frente al conjunto de José Mourinho, quien resiste en su cargo y se dio el gran gusto de golear en el templo culé.
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